En un post de su blog oficial, Youtube anuncia que los autores de los vídeos que están colgados en su web tendrán la opción de autorizar su descarga, ya sea gratuita, o ya sea de pago. En los primeros comentarios hechos al post en el blog oficial de Youtube, hay dos tipos de reacciones: están quienes lo celebran y están los que recuerdan que ya hay aplicaciones en la Red que sirven para descargar los vídeos. Es de suponer que las cabezas pensantes del Google/BroadcastYourself ya lo han previsto. Y o bien tienen el antídoto, contra esas descargas, o bien sus estadísticas de descargas les indican que el coste de búsqueda -y la complicación que el internauta tiene para la adopción de esa tecnología- representan una competencia asumible.
En todo caso, hay al menos dos cuestiones muy interesantes en el anuncio de Youtube:
1) Implicaciones. Todo está en Youtube. Y toda la audiencia está en Youtube. Si esta estrategia resultase exitosa, el negocio podría tener implicaciones que trascienden a la propia empresa. Sectores como el audiovisual podrían encontrar nuevas vías para hacer negocio. Y eso podría afectar a cuestiones sólo aparentemente alejadas del vil metal: como los géneros, por ejemplo. Aquellos que resulten más rentables, serán los más explotados.
2) El dinero quiere dinero. Youtube y Twitter. Ambas empresas han anunciado esta semana planes para atraer más ingresos. Hipótesis: en tiempos de turbulencia, el dinero necesita resultados; los apostadores de los mercados financieros necesitan evidencias. Ya se ha dicho en este blog: podríamos estar asistiendo al nacimiento de un enorme movimiento relacionado con la estructura económica de los negocios característicos de la Web 2.0.
En todo caso, hay al menos dos cuestiones muy interesantes en el anuncio de Youtube:
1) Implicaciones. Todo está en Youtube. Y toda la audiencia está en Youtube. Si esta estrategia resultase exitosa, el negocio podría tener implicaciones que trascienden a la propia empresa. Sectores como el audiovisual podrían encontrar nuevas vías para hacer negocio. Y eso podría afectar a cuestiones sólo aparentemente alejadas del vil metal: como los géneros, por ejemplo. Aquellos que resulten más rentables, serán los más explotados.
2) El dinero quiere dinero. Youtube y Twitter. Ambas empresas han anunciado esta semana planes para atraer más ingresos. Hipótesis: en tiempos de turbulencia, el dinero necesita resultados; los apostadores de los mercados financieros necesitan evidencias. Ya se ha dicho en este blog: podríamos estar asistiendo al nacimiento de un enorme movimiento relacionado con la estructura económica de los negocios característicos de la Web 2.0.
1 comentario:
Imagino que la gente de Youtube, quiere seguir los pasos de Steve Jobs, y su venta de musica digital.
Se ve que el momento en el que necesitan un plan de negocios para generar ingresos ya llego.
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